Desde el momento en que se anunció que una película basada en el libro Travelling to Infinity: My life with Stephen, de Jane Hawking, los aficionados al cine y la ciencia han ansiado conocer un poco más de la historia del brillante físico teórico Stephen Hawking. Y para ser honestos, no hay motivo alguno para no interesarse en la vida de uno de los personajes más célebres de la actualidad. Su fascinante mentalidad respecto al tiempo y el universo mismo atrae tanto como su inspiradora lucha contra una enfermedad motoneural, que lo puso en una silla de ruedas desde temprana edad.
El producto por fin ha llegado a los cines, y es absolutamente maravilloso. The Theory of Everything es una cinta conmovedora, llena de conflicto y esperanza, en la cual resulta evidente el esfuerzo que todo el equipo realizó delante y detrás de las cámaras para ofrecer al público un entretenimiento de calidad.
Eddie Redmayne y Felicity Jones están supremos en sus roles de Stephen y Jane Hawking. Redmayne se come la pantalla cada segundo que pasa frente a la cámara, imitando a la perfección hasta el más mínimo de los movimientos y gestos de su personaje. Jones, por su parte, dota a la cinta de un humanismo cálido e incluso romántico. El resto del cast está muy correcto, destacando a David Thewlis como Dennis Sciama, profesor de Doctorado de Hawking, al que veremos formar una conexión con el joven Stephen.
Mucho se ha comentado de la decisión del equipo sobre enfocar la cinta en el aspecto romántico de la vida de Hawking. Sin embargo, resulta imperativo para alcanzar una mayor audiencia que se de un acercamiento más humano y menos “puramente científico”. Es imposible creer que la mayoría de las personas que critican este aspecto podrían llevar de la mano sin ningún problema un argumento basado en ecuaciones complejas y teoremas matemáticos. El guión, pues, es bastante correcto y otorga una dosis ideal de romance, drama y redención al relato, abarcando desde los estudios de doctorado del profesor Hawking, hasta la publicación de su obra magna A Brief History of Time.
La banda sonora, a cargo del experimentado Jóhann Jóhannsson, instrumenta perfectamente el poderío visual logrado por la cinematografía de Benoît Delhomme. En conjunto con las actuaciones, estos elementos refuerzan la importante carga sentimental, vital para lograr una conexión verdadera con la audiencia.
Tal vez podrá haber personas que vean esta cinta como un melodrama de televisión. Sin embargo, será difícil encontrar otra biopic con una conjunción tan maravillosa de actuaciones, guión, fotografía y música. The Theory of Everything lanza un sinfín de preguntas provocadoras, poniendo al espectador a pensar durante su duración, y mucho después de concluir el visionado. Definitivamente, una película con el toque justo de cerebro y corazón.
a+f+g+s+r= The Theory of Eveything
donde:
a=Buenas actuaciones
f=Excelente fotografía
g=Guión inteligente
s=Score emotivo
r=Ritmo
The Theory of Everything=Genial película
