Uncategorized

¿Madres o Arpías Sádicas? Cuando el asesino es quien te dio la vida

Frustrated businesswoman screaming

Los primeros lloriqueos de un niño que acaba de nacer, sonidos estridentes que en otra circunstancia serían molestos y que en medio de un dolor descrito como inaudito se convierte de repente en la alegría más grandiosa que una mujer pueda experimentar. Tal vez como hombres nos sea complicado entender este hecho a pesar de compartir el mérito de la vida humana, pero una mujer sabe bien ese sentimiento porque lo lleva en su programación… lo lleva en sus genes. Las únicas lágrimas que una madre le dará placer en su vida, son las lágrimas de su hijo recién nacido. Es esa naturaleza creadora del ser humano que la condiciona a ello, es como un mecanismo de supervivencia que la llevara a entender que el dar vida, es el acto más maravilloso que pueda existir en el planeta.
Sin embargo sabemos que no todas las mentes son iguales, y así como una mayoría tendría ese sentimiento de bien, hay otras que simplemente no pueden asimilar la maternidad de la misma manera. Dejando de lados los múltiples complejos que pudieran existir o condiciones que llevan a una mujer a no desear un hijo, es en las mentes complejas obscuras donde encontramos los casos más aberrantes. Donde las historias de terror o más aun, el mayor miedo de un ser humano (el no ser amado en esta vida) se hace de manifiesto. ¿Qué se puede decir de una mujer que trae una vida al mundo solo para que sea su lienzo en blanco donde plasmara sus más negativas fantasías, sus aberraciones o sus exóticas manías homicidas o sádicas?
En repertorio de mujeres que matan a sus hijos es inmenso, o por lo menos en el camino de realizar mi podcast, me he encontrado con ejemplos que simplemente rebasan toda lógica profesional de especialistas de la conducta. Existen casos donde por ejemplo las proyecciones de una infancia turbia se vuelven en un factor que lleva a las mujeres a rechazar sus propios hijos al verlos como espejos de sus propias historias de vida maltrechas. Hay mujeres que ante el vacío de una autoestima y la necesidad de reconocimiento maltratan a sus hijos al grado de exponer sus vidas para ser ellas mismas el centro de la atención (Síndrome de Munchausen) y otras que simplemente su control emocional es tan bajo que pierden el raciocinio y entonces, ante una amenaza reaccion sin contemplacion a intentar retener o rechazar aquello que necesitan o les hace daño.
Uno de estos casos tétricos te lo comentare a continuación. Sucedió en Febrero del presente año en Bélgica. Según el diario británico The Mirror, una mujer de nombre Thioro Mbow bajo las influencias de drogas y alcohol, encerró a sus tres hijas, de dos, cuatro y seis años, y les prendió fuego, al tiempo en que los gritos de las pequeñas se mezclaban con risas y frases como “Puedo escuchar sus gritos, pero no voy a hacer nada para salvarlas, Deberías apurarte a llegar, aunque no creo que llegues a tiempo para salvarlas”. Cuando el esposo llego era demasiado tarde. La mujer lo recibió en la puerta de pie, con la mirada perdida, escena que se rompió cuando de repente se arrancó a gritar por un espacio de 10 minutos mientras el cuerpo inerte de sus hijas yacían calcinados en la habitación.

Usar a los hijos como carnada, quitarles su carácter de personas amadas y usarlos como objetos de una desquiciada venganza. Pero si esto sucedió en el viejo mundo, en México no nos quedamos atrás. ¿Recuerda usted el caso de la mujer que el año pasado le arranco los ojos a su hijo en un ritual religioso porque supuestamente el mundo se iba a acabar y ella intentaba con sus seguidores salvarlo y el niño no cerraba sus ojos en los rezos que hacían? Te tengo un episodio un tanto más antiguo, específicamente de 1996 (muchos crímenes interesantes para su estudio en la historia son ignorados porque no existía internet pata difundirlos con la facilidad de hoy en día) una mujer de nombre Verónica Aguilar Furlong mato a sus hijos de 8, 6 y dos años de edad en Puebla, dándoles de comer milanesas con raticida alegando en medio de sollozos, gritos e intentos de suicidio “Fue para salvarlos de la miseria”, aunque la realidad fue que lo hizo por celos, ante el abandono de su esposo que la había dejado para irse a vivir lejos de ella, a los Estados Unidos.

Un caso similar al de Thioro Mbow sucedió en Coahuila donde Rocío Hernández Rivera puso fin a las constantes peleas que tenía con su esposo, compró 20 pesos de gasolina y se la llevó a casa; mientras sus dos hijos dormían la lanzó sobre sus cuerpos y les prendió fuego, rociándose ella con más gasolina y abrazándolos para morir los tres.

Es también es ese país donde no hace muchos años se registró un caso impresionante protagonizado por una joven madre de 22 años de nombre Alexandra Tobías la cual, se enfrenta a un juicio por asesinato en segundo grado que podría llevarla a la cadena perpetua, la razón: era adicta a jugar Farmville y se encontraba en una de su sesiones de juego cuando su pequeño hijo de 3 meses de edad comenzó a llorar, por lo que ella lo sacudió varias veces hasta que el menos perdió la vida al tiempo que ella fumaba un cigarro. El alegato de Alexandra es de que se trató de un accidente donde en una de las sacudidas azoto accidentalmente la cabeza del pequeño contra el teclado, y aunque suene lógico judicialmente hablando nos habla de una decadencia en donde de principio, la violencia es una salida simple y hasta normal ante los estresores de la vida diaria.

Es obvio que no todos los casos de homicidio infantil por parte de la madre son provocados por psicópatas ni sociópatas, también las enfermedades mentales no tratadas o controladas son puntos rojos que pueden escribir historias tristes y crueles. Otty Sanchez de 33 años de edad fue acusada de la muerte de su hijo Scott y dejada en libertad después de pagar una fianza y ponerse a disposición de un hospital psiquiátrico para su tratamiento de Esquizofrenia, pues en un ataque de la misma escuchó una voz que le decía que su hijo era el diablo. Por culpa de esta voz, Otty se fue contra el pequeño de casi un mes de nacido y con dos espadas lo desmembró comiéndose el cerebro, desprendiéndole la cara y masticando sus dedos y pies para decapitarlo y auto herirse para quitarse la vida. (Su fotografía es la que puedes ver al final de la nota)

La próxima vez que te quejes de que tu madre es de un universo extraño y que no te entiende primero trata de entenderla como un ser humano, no como tu marioneta y date cuenta que con sus defectos y virtudes, aun si te toco un caso difícil o una madre con personalidad difícil, estas aquí y puedes dar las gracias por no tener una madre maltratadora o asesina. La vida es una ruleta muy extraña y cientos de casos ahí afuera te pueden hacer reflexionar… el único consejo es también no como profesional sino como persona… si no estás segura de tener un hijo o tienes dudas piénsalo dos veces, y si vives la experiencia déjate llevar por todo el amor que este te provocara, dejando tu lado obscuro en manos de profesionistas o gente que te ama.
Te invito a que esta semana escuches un nuevo capítulo de mi podcast en http://darkmaniac.ivoox.com donde hablaré de leyendas de internet y asesinatos. Nos leemos la próxima semana dejándote con una rola muy apropiada para estos días. Cualquier duda sobre esta publicación o comentario son bienvenidos. ¡Que tengas sádicas pesadillas!

11198944_847362075300401_1500833679_n

También puede gustarte...